domingo, 2 de mayo de 2010

Viajes en solitario

Ayer hablaba con una amiga de la sensación de libertad que proporciona viajar solo. Bastantes de vosotros ya sabréis que me he hecho algún que otro viaje solo: mochileo por Sudamérica, un tramo del Camino de Santiago, alguna que otra escapada de 5-6 días...
Alguno de vosotros ya debéis estar hartos de que os cuente las maravillas y aventuritas de estos viajes, de lo bien que sientan y la "revolución interior" que han supuesto para mí.
Así que me he puesto a reflexionar por qué me han resultado tan especiales estas escapadas, y he llegado a las siguientes razones:
  • Por la independencia: no dependes de nadie a la hora de decidir qué hacer, dónde ir, o a qué hora levantarte. Simplemente, eres el amo y señor de tus decisiones. Pero no es una independencia egoísta, sino que muchas veces la empleas en "unirte" a alguien algún tramo del viaje. Y si no, que se lo digan a los que han hecho el Camino con un "compañero de Camino", la unión tan especial que se fragua con esa persona.
  • Por la aventura: en una vida bastante estrecha, relativamente monótona, con poco "margen de locura" y menos oportunidades de improvisación... viene bien encontrarse con que tu vida es un lienzo en blanco que debes rellenar a base temas desconocidos, en sitios insospechados y con acompañantes inesperados.
  • Por volver a la esencia: en estos viajes te encuentras con mucha gente que está buscando, que se está planteando cosas importantes en su vida. Descubres que no eres un "rarito" por hacerte preguntas seria... y además descubres que la gente, en el fondo, está ansiosa por se útil (en el sentido más profundo de la palabra: por poder ayudar a los demás). Y es que, por lo general, en el ambiente mochilero de los albergues hay un espíritu de hermandad que, por desgracia, sorprende cuando lo encuentras.
  • Por tomar distancia: ves los problemas desde lejos, desde fuera del bosque, y te das cuenta de que, los problemas que nos parecen inmensos e irresolubles en la vida cotidiana no son ni lo uno ni lo otro
  • Por desarrollar tu "lado luminoso", cual caballero Jedi. Muchas veces te pones a prueba, te enfrentas a situaciones que no te crees capaz de resolver y ves que sí, que puedes con ellas (no te quedan más narices, claro). Poco a poco, te entra una sensación de fuerza, de autoconfianza, que es alucinante.
En definitiva, por demasiadas cosas imposibles de explicar sin haberlas vivido. Espero, al menos, haberos animado a probar un poquito la experiencia, aunque sólo sean 4 días, y despertaros el gusanillo de este tipo de "reencuentros".
Ahí va una postal que he visto hoy en PostSecret con la que me he sentido totalmente identificado.

1 comentario:

Unknown dijo...

Mira que yo me considero independiente, pero viajar sola o ir sola al cine me dan un panico inexplicable.... Pero hacer solita un tramo de 4 dias del Camino de Santiago si me gustaria. Ademas ahora que tengo bebes pegados como un grano en el culo desde hace 3 años, cada vez me parece mas apetecible esto de viajar sola.... voy a madrid en breve... te avisare, vale? besos